Yo no sé sí me habré vuelto invisible para el mundo, es muy probable. Pero nunca, como hoy fui tan consciente de mi existencia, nunca me sentí tan protagonista y nunca disfruté tanto de cada momento como ahora.También he padecido y eso me ha dado más carácter y fuerza en mi vida.
Ahora sé que no soy ninguna princesa de cuento de hadas, que no necesito de ningún príncipe azul, que con su caballo blanco me rescate; por que ni soy ni quiero ser una princesa, ni vivo en una torre, ni tengo un dragón custodiándome.
Hoy me reconozco como mujer, capaz de amar.
Sé que puedo dar sin pedir, pero también sé que no tengo que hacer nada, ni dar nada que no me haga sentir bien. Que me dañe o simplemente no me guste.
Por fin comprendí lo que soy, un ser humano con sus miserias y sus grandezas.
Descubrí, que puedo permitirme el lujo de no ser perfecta, de estar llena de defectos, de tener debilidades y de equivocarme, de no responder a las expectativas de los demás y hasta hacer algunas cosas indebidas....
...y a pesar de ello sentirme bien conmigo misma.
Y sobre todo, saberme querida por personas que me respetan y me quieren por lo que soy. Si...así, un poco loca, cabezota, también cariñosa y a veces triste. Que me aceptan como soy y no esperan más de lo que yo puedo dar.
Cuando me miro al espejo, ya no busco a la que fui en el pasado, tengo heridas del paso por la vida, pero la mayoría ya no sangra y solo quedan las cicatrices, que son el reflejo de que he vivido intensamente.
Sonrío a la que soy hoy, me alegro del camino andado y asumo mis errores.
Sonrío a la que soy hoy, me alegro del camino andado y asumo mis errores.
He aprendido a tener paciencia.
Puritadinamita.
m'has deixat bocabadada!!! ets una artista, a a partir d'hara ja no et dire dinamita, sino plumita. m' agrada molt princesa!!!!! ( ara a veure si el puc enviar)
ResponderEliminarDiguis el que diguis per mi continues essent una princesa urbana.
ResponderEliminarUn petó,
mglòria